Senda Cabo de Trafalgar
Esta senda parte del monumento natural del Tómbolo de Trafalgar y va paralelo a la costa pasando por los sistemas dunares de playas como la de Zahora, El Palmar, o Castilnovo y después de atravesar unas marismas, llegar a Conil de la Frontera.
Partiremos del Chiringuito "Las Dunas" muy cerca de Caños de Meca y subimos por una carretera asfaltada cerrada al tráfico hasta el Faro de Trafalgar, que es rodeado por una plataforma de madera donde existe un panel explicativo de la Batalla de Trafalgar, y también podemos disfrutar de una vista panorámica de la Playa de Marisucia, la cala de Trafalgar y la playa de Zahora por donde discurre la ruta a través de un camino arenoso que va uniendo varias torres defensivas del siglo XIII que mando a construir Alfonso Pérez de Guzmán "El Bueno".
La ruta es fácil para realizar con niños, sobre todo en el Tómbolo de Trafalgar, ya que la pasarela realiza un recorrido circular (apenas 2Km desde el chiringuito) donde se puede observar una flora dunar importante y el avistamiento de aves a su paso por el Estrecho de Gibraltar camino de África, que, por cierto, también se divisa. El resto del camino es de arena suelta y puede dificultar mucho el caminar del senderista, aunque si está la marea baja, se puede ir por la playa incluso en bicicleta.
Actividad:
Senderismo Nivel Básico No Circular
Distancia XX km., Desnivel XXX metros de subida y XXX de bajada, Tiempo 2 horas.
Incluye:
Comida y bebida.
Seguro de responsabilidad civil.
Precio:
Puntos de salida:
El encanto y la magia de Los Caños se concentran en gran medida en el área que rodea al faro y cabo de Trafalgar.
Comenzamos la ruta desde el núcleo de población de Caños de Meca , por ejemplo, delante de los apartamentos.
El trayecto no es demasiado largo, no llega a los 2 kilómetros y transcurre a lo largo de la playa de la pequeña bahía que forma el cabo de Trafalgar, una zona conocida como la curva o Marisucia.
El primer tramo que recorreremos es de arena salpicada de rocas. Dependiendo de la época del año y del flujo de mareas el suelo será más o menos arenoso.
No es un lugar aconsejable para el baño por los fondos rocosos que pueden ser peligrosos si no se conocen.
La playa de Marisucia
El segundo tramo comienza con la llegada a la playa de Marisucia propiamente dicha , bastante mejor para bañarse por el predominio de la arena, no tan fina como en otras zonas pero arena al fin y al cabo. Esta playa suele tener muchas algas y cuando sopla el levante recibe los desechos que el mar arroja a la orilla.
Es curioso detenerse a observarlos pues se pueden encontrar entre ellos extraños objetos o incluso peces y otros animales como tortugas varados en la playa. El mejor momento para estar en ella es con viento de poniente ya que el mar está como un plato y recuerda por su ubicación y por sus aguas trasparentes a playas tropicales. El mejor momento ( como en todo Caños de Meca ) es el atardecer, a partir de las 7 de la tarde en verano y un poco antes en invierno.
Si seguimos nuestro camino volvemos a un tramo rocoso muy frecuentado por marisqueadores y entramos ya de lleno en el cabo de Trafalgar. Si continúa por la linea de costa observará los arrecifesque se descubren con marea baja y que hacen que la zona sea poco profunda y tenga aspecto de plataforma.
Los arrecifes
En realidad, los arrecifes del faro son eso, un gran plataforma que rodea todo el cabo. Entrando en las rocas podrá observar unas curiosas formaciones circulares talladas en la piedra. Son los huecos de las piedras de molino que antiguamente se sacaban de ahí.
Continuando por la línea de costa, mejor con marea baja, se llega a las pequeñas calas de arena , que conforman un paraje de singular belleza paisajística entre las dunas del montículo del faro y el propio faro como testigo de fondo. El promontorio es una gran duna retenida por la vegetación con una zona rocosa sobre la que se asientan el faro y sus instalaciones.
El promontorio y el faro
Al pasar las calas subimos hasta el faro y desde allí arriba se puede gozar de una preciosa vista a la inmensidad del mar y a la gran playa que se extiende hacia Conil.
El lugar, aunque parece poco habitable por su aridez y por su cercanía al mar está cargado de historia. En la época romana , donde hoy se levanta el faro, existía un templo dedicado al dios Juno. Había incluso un altar para los sacrificios en su honor. Aún hoy, algunos submarinistas dicen haber visto el templo sumergido en las aguas del cabo. Los Árabes construyeron en el siglo IX una torre de vigilancia cuyos restos aún hoy pueden verse junto al faro.
Es la torre de Trafalgar, de planta cuadrangular reforzada por sillares, parcialmente derrumbada a mediados del siglo XIX para construir el faro con sus restos.
Pero el hecho que impregna realmente de historia al paraje es la Batalla de Trafalgar, acaecida en 1805 y que enfrentó a las tropas franco-españolas contra la inglesa en un encuentro que tuvo como resultado la victoria inglesa , la muerte de cientos de personas y el hundimiento de decenas de barcos que aún hoy, yacen bajo las aguas como restos tétricos del acontecimiento bélico. Sobrecoge mirar al horizonte e imaginar el ruido de los cañones, los gritos de los marineros y el fuerte temporal que azotó esa noche en la zona.
El faro actual data de 1860 y ha sufrido varias reformas hasta nuestros días, siendo la más importante la de 1929, con la reestructuración de su aparato óptico. Es una torre troncocónica esbelta , blanca y de 34 metros de alto.
La gran playa
Desde el monte se puede bajar a la enorme playa arenosa que parte del cabo y va más allá de Conil. Es peligrosa por las fuertes corrientes de la zona y el oleaje , aunque en ella se disfruta siempre de una agradable tranquilidad y de una puesta de sol única sobre el horizonte.
Cerca de Trafalgar existen diferentes bancos o bajos rocosos que se deben evitar por los peligros de embarranque que comportan, como en el caso del Banco del Hoyo, que arbola en mar gruesa, o del Banco de Trafalgar, en cuyas inmediaciones el agua incluso amarillea por acción de las arenas removidas por la corriente.
La riza de Trafalgar es un fenomeno que se da al suroeste y oeste-suroeste del cabo, cuando se producen corrientes submarinas de distintas direcciones provocadas por las mareas. Es un fenomeno que puede llegar a ser muy violento y que es uno de los más temibles del estrecho. En tales circunstancias conviene apartarse de los bancos para evitar el arrastre y los rompientes.
La historia de Los Caños de Meca esta vinculada al estrecho de Gibraltar, Fretus Herculeum de los romanos o Boughaz el Tarek de los árabes.
Primeras noticias
En la antigüedad las únicas vías del comercio eran por el mar, la incapacidad para una navegación de altura hacia que los accidentes geográficos de las costas fueran fundamentales para el comercio fenicio y romano, Trafalgar era punto de obligado paso en las rutas hacia Gades, Hispalis, Onuba etc. Dada la riqueza en pesca se asentaron en los caños factorías de salazón de pescado, de las que quedan restos en la playa de marisucia y junto al faro, produciéndose el famoso Garum, salsa de pescado, que tenía gran venta en Roma.
De los romanos aún se puede ver el templo al dios Juno, hoy sumergido bajo las aguas. Algunos submarinistas afirman haberlo encontrado, y en las instalaciones del faro parece haber restos.
De la época visigoda es la fundación de la Ermita de San Ambrosio, con una única nave dividida en tramos por medio de 4 arcos apuntados que servían de soporte a la cubierta, hoy perdida.
Edad media y dominación árabe
Durante la Edad Media los árabes colonizaron Vejer, dieron el nombre al promontorio de la costa como Trafalgar , “promontorio de la cueva” , eran época en que las costas no eran seguras para vivir por el constante paso de piratas, por lo que la población vivía en la ciudad de Vejer.
De los árabes se conserva la torre de Trafalgar, situada junto al faro, que data del siglo IX.
Los propios árabes, asombrados por la abundancia de agua dieron nombre a la zona inspirándose en la ciudad santa de La Meca.
Reconquistada la zona por el duque de Medina sidonia, paso a ser zona fronteriza con el reino de Granada.
Durante los siglos XV y XVI la zona perteneció al ducado de los Medina-Sidonia, asentándose en sus proximidades almadrabas para la pesca de atún (Barbate y Zahara). De esta época son las torres vigías de Meca y del Tajo , que servían para avisar de la llegada de corsarios moriscos de los cercanos puertos de Asilah, Larache, Teuan y Sale; es la época del no hay moros en la costa. Estas costas seguían sin poder habitarse.
La Batalla de Trafalgar
A principio del siglo XIX (1805) tuvo lugar la famosa batalla de Trafalgar entre las flotas inglesa y franco-española, que partiendo respectivamente de los puertos de Gibraltar y Cádiz, se encontraron a medio camino. Este hecho dio nombre internacional al lugar, y ha sembrado de pecios los fondos de la zona.
A final del siglo XIX se construye el faro de Trafalgar, más concretamente en 1874, levantado sobre un antiguo faro romano. Se usaron materiales del templo romano y de la pila de sacrificios . En aquella época las playas del faro eran conocidas como de las calderas, por los abundantes naufragios. Para los marinos, Trafalgar se cruza muy a mar o muy a tierra , ya que en medio están los arrecifes.
Siglo XX
El siglo XX vio nacer los fortines, usados para evitar desembarcos. Existiendo aun restos , uno bien conservado en el Pirata y otro en los apartamentos. Se construye también la casa-cuartel de la Guardia Civil , para la vigilancia de la costa, y se repobla de pinos la zona de la Breña, actual pinar. Tras la Guerra Civil se crea el municipio de Barbate y la zona pasa a depender administrativamente de esta población.
En estos años, la abundancia de agua propició la existencia de pequeñas huertas. En los años 60 comienza el auge turístico de Los Caños, con población de pueblos cercanos y posteriormente de otros lugares de Andalucía (Cádiz y Sevilla).
Se crean la carreteras, y desde los setenta se convierte en centro famoso de movida y nudismo, continuando en la actualidad. En los últimos años el número de turistas está creciendo progresivamente y se están comenzando nuevos proyectos de urbanización.
La Ruta rural Cabo de Trafalgar recorre una distancia que va desde el Monumento Natural del Tómbolo de Trafalgar hasta el núcleo urbano de Conil de la Frontera, e incluye las playas y torres vigías del litoral de los términos municipales de Barbate,Vejer de la Frontera y Conil.
La Ruta Rural Cabo de Trafalgar es una ruta rural que podras recorrer a pie, en bicicleta o a caballo.
El recorrido por el litoral ofrece una interesante muestra de sistemas dunares con vegetación característica y bellas panorámicas marinas en toda la línea de costa.La ruta parte del cabo de Trafalgar –frente al cual tuvo lugar la emblemática batalla el 21 de octubre de 1805–, donde se encuentra el faro y una antigua torre de almenara. Ambos están ubicados en un tómbolo declarado
Monumento Natural y que contiene interesantes yacimientos, como una factoría romana y un asentamiento hispano-musulmán. Esta lengua de arena separa las ensenadas de Barbate y Conil de la Frontera; entre sus barras dunares queda delimitada una antigua laguna costera casi colmatada de arena que con las lluvias se rellena de agua salobre, albergando una importante variedad de
fauna y flora.
El itinerario se traza paralelo a la costa por una mota elevada, entre las urbanizaciones y las playas de Las Plumas y Zahora. Al llegar a la playa de Las Calderas se vadea el arroyo de San Ambrosio o Zahora, que además hace de límite entre el término municipal de Barbate y el de Vejer de la Frontera. Cuando la ruta alcanza la magnífica playa de El Palmar y su barriada, en la punta Roque del Este (límite de pleamar) se ubica la torre vigía Torre Nueva o de El Palmar. Esta torre formaba parte de un interesante sistema defensivo del s. XIII promovido porAlonso Pérez de Guzmán, “el Bueno”, aprovechando las ventajas de visibilidad que ofrecía su estratégico emplazamiento costero. Estas atalayas o torres de almenara constituyeron así la línea defensiva del territorio. A continuación se alcanza el arroyo Conilete, que hace de límite entre Vejer y Conil, dando acceso a la playa y el prado de Castilnovo, donde se encuentra la torre del mismo nombre. En este punto, en el que se produce el contacto de la campiña con el litoral, la ruta se adentra en tierras ganaderas y cruza el río Salado, para acceder a Conil de la Frontera. El casco antiguo de Conil posee un entramado de calles estrechas y empinadas (Ver Calles tipicas de Conil) unido a un conjunto amurallado originario de principios del s. XVI que actualmente conserva sus puertas y algunas torres; el pasado agrario y pesquero del pueblo mantiene su fisonomía de casas encaladas y una configuración urbanística de calles ortogonal a la costa.
Datos de la Ruta Rural Cabo de Trafalgar
Longitud de la Ruta: 11,3 km aprox.
Inicio: Cabo de Trafalgar
Final: Conil de la Frontera
Grado de dificultad: medio
Desnivel: escaso
Puntos de interes
1 Monumento Natural del Tómbolo de Trafalgar
2 Las vías pecuarias y la vereda de la Playa
3 El litoral y los usos del suelo
4 Restauración de sistemas dunares
5 Torre Nueva o Torre de El Palmar
6 Torre de Castilnovo
7 Prado de Castilnovo